http://www.lavanguardia.es/lv24h/20080328/53448805619.html
De la Vega subraya que el Ejecutivo seguirá trabajando y colaborando con la Generalitat para garantizar el abastecimiento de agua potable
Madrid. (EFE).- La vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró que la política del agua en Catalunya es igual que en el resto de España y que "ni hay ni habrá trasvase del Ebro", en respuesta a la valoración del Ejecutivo sobre la propuesta de la Generalitat de realizar una trasferencia de agua desde el Segre (afluente del Ebro) hasta la cuenca del Llobregat.
"El Gobierno no se opone con carácter general a los trasvases. Se opone a los trasvases de agua que resultan insostenibles desde el punto de vista económico, social y medioambiental, como es el caso del trasvase del Ebro, que por cierto ni está ni estará", dijo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
En todo caso, subrayó que seguirán trabajando y colaborando con las instituciones catalanas de la Generalitat para garantizar el abastecimiento de agua potable, utilizando "todos los instrumentos que ya se están utilizando", entre ellos, agua de la desalinizadora de Carboneras (Almería).
"Situación delicada para todos los usos
Por su parte, la ministra de Medio Ambiente en funciones, Cristina Narbona, presentó hoy al Consejo un informe sobre la situación hídrica que advierte de que la situación en las cuencas internas de Cataluña es "muy delicada" para todos los usos.
Además, el Consejo de Ministros aprobó un paquete de medidas para luchar contra la sequía histórica que sufre el arco mediterráneo, las cuencas del Tajo y del Guadalquivir. Los datos de medio ambiente ponen de manifiesto que los pasados periodos de otoño e invierno son los más secos de la serie histórica. Así, en las Cuencas del Segura y Júcar, se esperan "importantes restricciones para el regadío", así como en la Cuenca Mediterránea Andaluza, donde además persiste una situación delicada de abastecimiento a población en la ciudad de Málaga. En la del Guadalquivir no se esperan, a día de hoy, problemas para 'agua de boca".
Consumo de agua garantizado
"Es una situación que requiere de la colaboración de los ciudadanos y administraciones públicas para garantizar el suministro de agua potable a toda la población. Desde luego, los ciudadanos pueden estar tranquilos porque el abastecimiento de agua seguirá estando plenamente garantizado", insistió De la Vega.
En todo caso, destacó que la sequía se está dejando sentir, con especial intensidad, en el arco mediterráneo, en la cabecera del Tajo y en la cabecera del Guadalquivir. Por eso, el Consejo ha decidido reservar todos los excedentes de los recursos hídricos de la cabecera del Tajo para atender al abastecimiento humano.
Así, teniendo en cuenta que las reservas actuales son de unos 179 hectómetros cúbicos hasta el mes de junio, el volumen máximo a trasvasar en el acueducto Tajo-Segura será de 39 hectómetros cúbicos. De esta manera, se asegura que las existencias en el sistema de cabecera del Tajo no descenderán por debajo del límite legal de los 240 hectómetros, en ningún caso se pasará el límite.
El Gobierno asegura que también ha analizado la "grave situación" de los regadíos en Murcia, pero que garantizar el abastecimiento a las poblaciones sigue siendo el "objetivo fundamental", por lo que es necesario esperar a las precipitaciones que puedan producirse a lo largo de la primavera y la recuperación del sistema de la Cabecera del Tajo antes de poder plantear atender otras demandas.
También dio el visto bueno a las obras de emergencia que el Ministerio de Medio Ambiente está llevando a cabo para la ejecución de las actuaciones que faciliten la utilización de los recursos de la desalinizadora de Carboneras (Almería), con una inversión de 12 millones de euros.
El objetivo, una vez atendidos los usos de la zona, es que sean una fuente puntual y excepcional de nuevos recursos para toda la zona afectada por la sequía en el arco mediterráneo. La planta puede producir alrededor de 100.000 m cúbicos al día de agua desalinizada que en la actualidad no se están consumiendo.
Igualmente, autorizó , por un importe superior a los 34 millones de euros, las obras para construir la estación de tratamiento de agua potable de la red de abastecimiento a la llanura manchega, así como un incremento de los compromisos de gasto del Ministerio de Medio Ambiente con cargo a los ejercicios 2009-2013, de más de 769 millones para acelerar la licitación y adjudicación de obras para actuaciones en materia de agua en Canarias y Castilla-La Mancha.
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